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sábado, 23 de julio de 2011

El derecho y el principio de Antígona



La primera distinción entre las 2 vertientes del derecho, el derecho natural y el derecho positivo la realizó Santo Tomás de Aquino: "el derecho o lo justo es algo adecuado a otro, conforme cierto modo de igualdad. Pero una cosa puede ser adecuada a un hombre de dos maneras. Primera, atendida la naturaleza misma de las cosas; por ejemplo, cuando uno da tanto para recibir otro tanto: y esto es Derecho Natural. Segunda, por convención o común acuerdo, es decir cuando alguno se manifiesta satisfecho con recibir tanto; y esto puede realizarse de dos formas: por un convenio privado, como el que se constituye mediante un pacto entre personas particulares; o por convención pública, verbigracia, cuando todo el pueblo consiente en que algo se considere como adecuado y ajustado a otro, cuando lo ordena la autoridad que representa al pueblo”. 
En la actualidad percibimos como se contrapone rigurosa e intencionalmente al Derecho Natural con el Positivo. El Derecho Positivo es la expresión de quien gobierna, de aquel que detenta transitoriamente el poder. Este derecho es sancionado por el legislador y modificable según la sociedad y las épocas, es decir que varía brusca y radicalmente en el tiempo y en el espacio, hasta llegar a extremos insospechables y racionalmente ilógicos.
En contraste con lo dicho, el Derecho Natural es un ideal de las normas, una legislación universal y atemporal que, por lo tanto, debería regir a todos los pueblos, con absoluta independencia de las modificaciones de índole cultural que en cada uno de ellos encontremos. 

Lo que se denomina Derecho Natural es, en definitiva, el fundamento último de validez de toda ley humana positiva. Hay que observar esta relación sustancial, como dos aspectos de una misma realidad, el Derecho Positivo es, respecto del Natural, el garante más sólido de vigencia, ya que los principios del Derecho Natural sólo rigen verdaderamente en un pueblo cuando son contemplados, comprendidos y expresados por la ley Positiva (leyes, artículos, códigos, disposiciones en general)).
 Por eso hay que dejar en claro que no todo lo que dice una ley positiva es necesariamente justo. Y es primordial, para comprender esto, la distinción entre el Derecho Positivo cuyo contenido es de Derecho Natural pero que ha sido sancionado y promulgado por la autoridad vigente, y el Derecho Positivo que es indiferente al Derecho Natural, pero que de todos modos es obligatorio para la sociedad.

Esta introducción que extraje de http://www.atinachile.cl/content/view/82162/DERECHO-NATURAL-V-S-DERECHO-POSITIVO.html  me resulta útil para redactar ahora, el mito griego de Antígona que refleja a las claras, en una simple historia, la conjunción y enfrentamiento entre estos 2 derechos. Antígona y los personajes del mito se ven en la disyuntiva de si cumplir con el derecho natural o con el derecho positivo. El mito tiene varios posibles finales según diferentes historiadores pero he elegido el que me parece más acorde con lo que se intenta expresar. ¿Hay 2 derechos o en realidad sólo hay uno y el otro es impuesto? Espero que resulte enriquecedor:  

Antígona era una de las dos hijas del rey Edipo de Tebas, nacida de la unión oscura y trágica entre Edipo y su madre, Yocasta. Pero, a pesar de su sombrío nacimiento, el carácter de Antígona era leal y amoroso, y sus acciones eran absolutamente intachables. Después de que su padre descubriera la vergüenza de su matrimonio y tras ser expulsado de Tebas, ciego y perseguido por las vengativas Furias, Antígona fue su guía fiel mientras permaneció vagando de un país a otro durante años.

Tras el destierro de Edipo, sus hijos gemelos, Polinices y Eteocles, fueron elegidos ambos reyes de la ciudad, tras lo cual acordaron que cada uno reinaría en años alternos. Pero Eteocles, a quien le correspondió el primer periodo, no quiso dejar el trono al final del año y desterró de la ciudad a su hermano Polinices. En consecuencia, se desató una guerra terrible entre ambos hermanos por el reinado. Polinices, para evitar nuevas matanzas, propuso que la sucesión del trono se decidiera mediante un combate con su hermano. Eteocles aceptó el desafío, y en el curso de la amarga pelea que siguió se hirieron mortalmente el uno al otro. Por consiguiente, su tío Creón tomó el mando de los ejércitos y se declaró a sí mismo rey de Tebas, promulgando un dictamen por en que se ordenaba que sus sobrinos muertos no podían ser enterrados, negándoseles así las honras fúnebres. Sin recibir entierro, sus sombras deberían vagar eternamente por las orillas de la laguna Estigia. A quien desobedeciera este edicto, se le enterraría vivo como castigo.

Pero Antígona, que había amado intensamente a su hermano Polinices, sabía que la maldad que había conducido a la guerra provenía de Eteocles. Salió, pues, ocultamente por la noche e hizo una fogata en la que colocó el cadáver de Polinices con objeto de liberar su alma en su viaje al inframundo.

Al mirar desde la ventana de su palacio, el rey Creón percibió un lejano resplandor que parecía proceder de una fogata ardiente y, al ir a investigar, sorprendió a Antígona en su acto de desobediencia. Llamó a su hijo Hemón, a quien Antígona había sido prometida, y le ordenó que la enterrase viva. Hemón insistió hasta el cansancio a su padre que revea esta órden pero este hizo oídos sordos a su clamor y entonces fingió hacer lo que le habían ordenado pero, en lugar de ello, se casó con Antígona en secreto y la envió lejos a vivir entre sus pastores. Allí nació un hijo de ambos. Así, la disposición de Antígona a morir, en lugar de traicionar a su corazón, y el valor de Hemón en desobedecer la orden de su padre, creó vida en lugar de muerte.

lunes, 11 de julio de 2011

Facundo Cabral


El 9 de Julio de 2011 fue asesinado el cantautor argentino Facundo Cabral, hombre de paz profunda y de gran capacidad de reflexión. Casi premonizando su muerte él recordaba: "mi padre supo decir que no todos tienen la muerte que se merecen y no todos merecen la muerte que tuvieron" ... y sin duda el no merecía esta muerte.
Compartiendo algunas cosas y otras no tanto, trascribo de manera textual una de sus tantas reflexiones que siempre algo dejan:

De mi madre aprendí que nunca es tarde, que siempre se puede empezar de nuevo; ahora mismo le puedes decir basta a los hábitos que te destruyen, a las cosas que te encadenan, a la tarjeta de crédito, a los noticieros que te envenenan desde la mañana, a los que quieren dirigir tu vida por el camino perdido.
Ahora mismo le puedes decir basta al miedo que heredaste, porque la vida es aquí y ahora mismo. Que nada te distraiga de ti mismo, debes estar atento porque todavía no gozaste la más grande alegría, ni sufriste el más grande dolor.
Vacía la copa cada noche para que Dios te la llene de agua nueva en el Nuevo día. Vive de instante en instante, porque eso es la  vida.  Me costó 57 años llegar hasta aquí, ¿Cómo no gozar y respetar este momento?
Se gana y se pierde, se sube y se baja, se nace y se muere. Y si la historia es tan simple, ¿Por qué te preocupas tanto?
No te sientas aparte y olvidado, todos somos la sal de la tierra. En la tranquilidad hay salud, como plenitud, dentro de uno. Perdónate, acéptate, reconócete y ámate. Recuerda que tienes que vivir contigo mismo por la eternidad, borra el pasado para no repetirlo, para no abandonar como tu padre, para no desanimarte como tu madre, para no tratarte como te trataron ellos; pero no los culpes, porque nadie puede enseñar lo que no sabe, perdónalos y te liberarás de esas cadenas
Si estás atento al presente, el pasado no te distraerá, entonces serás siempre nuevo. Tienes el poder para ser libre en este mismo momento, el poder está siempre en el presente porque toda la vida está en cada instante, ¡Pero no digas no puedo ni en broma, porque el inconsciente no tiene sentido del humor, lo tomará en serio, y te lo recordará cada vez que lo intentes!.
Si quieres recuperar la salud, abandona la crítica, el resentimiento y la culpa, responsables de nuestras enfermedades.
Perdona a todos y perdónate a ti mismo, no hay liberación más grande que el perdón; no hay nada como vivir sin enemigos. Nada peor para la  cabeza, y por lo tanto para el cuerpo, que el miedo, la culpa, el resentimiento y la crítica (agotadora y vana tarea), que te hace juez y cómplice de lo que te disgusta.
Culpar a los demás es no aceptar la responsabilidad de nuestra  vida, es distraerse de ella.
El bien y el mal viven dentro tuyo, alimenta más al bien para que sea el vencedor cada vez que tengan que enfrentarse. Lo que llamamos problemas Son lecciones, por eso nada de lo que nos sucede es en vano.
No te quejes, recuerda que naciste desnudo, entonces ese pantalón y esa camisa que llevas, ya son ganancia. Cuida el presente, porque  en él vivirás el resto de tu vida.
Libérate de la ansiedad, piensa que lo que debe ser será, y sucederá naturalmente.
"Quizá el mayor desafío del ser humano en los albores del tercer milenio no sea acabar con el terrorismo, sino precisamente ampliar ese mapa universal que posibilita una mirada más generosa, una percepción más incluyente; quizá nuestro mayor reto presente no sea el de dar con el saudí que tumbó torres e hizo tronar el mundo, sino el de romper el ensueño de la separación y las limitaciones de los sentidos y recuperar nuestro, más  que probable, linaje como hijos de las estrellas, eternos navegantes del cosmos; quizá sea constatar que no estamos solos, que compartimos universo. Nos encontramos en la más preciosa aventura jamás vivida: la suerte inmensa de reunirnos, festejar, reír y materializar, desde nuestra individualidad, un universo de colaboración entre sus seres, quienes, gobernados desde nuestro universo interior, vivimos el sueño de ser amor universal".